Los grupos de presión son electrobombas y aparatos que incrementan la presión, velocidad y altura del agua y cualquier otro tipo de fluido.
Este equipo es prácticamente obligatorio para las comunidades, ya que sin él se verían afectado ciertas personas que viven en la edificación, contando con una presión de agua muy baja o incluso existirán zonas en donde no llegue ni una gota.
El agua es un servicio imprescindible para las personas, ya que sin ella nuestra calidad de vida se ve muy afectada e incluso no podríamos vivir.
Además, el agua tiene muchos usos, ya que podemos utilizarla para consumo, para cocinar, asearnos, limpiar nuestra ropa y hogar.
El mantenimiento es muy necesario en estos casos, debido a que los edificios comunitarios deben contar con un grupo de presión en buenas condiciones para que el agua se distribuya a todas las zonas correctamente, así todas las personas tendrán el suministro de agua adecuado.
Debido a esto, es muy importante que el equipo de presión de líquidos trabaje de forma eficiente, ya que esto garantiza que el líquido llegará sin problemas a toda la comunidad.
Esto se logra aplicando un mantenimiento preventivo y completo en el tiempo justo, para así evitar que la calidad y la presión del agua disminuya.
Además, se puede ahorrar mucho tiempo y dinero si se corrigen los problemas a tiempo y se evita que una pequeña avería se transforme en un daño más grande.
Y es que, si los daños no se corrigen a tiempo, se pueden deteriorar los equipos y las instalaciones del grupo de presión. También, se pueden crear agentes contaminantes que afectarán la calidad del agua y la salud de las personas.
Realizar un mantenimiento constante y oportuno a los grupos de presión comunitaria es de vital importancia, ya que esto evitará que existan averías en las instalaciones y componentes.
En caso de existir una avería, esta puede agravarse y traer consigo daños muy graves y muy perjudiciales al sistema. Por lo tanto, si no se aplica el mantenimiento preventivo, ¡los costes pueden ser muy altos!
Además, un buen mantenimiento garantiza la salud de las personas, porque evita que se creen organismos perjudiciales que pueden llegar a producir enfermedades.
Si el mantenimiento de los grupos de presión no se realiza oportunamente, esto ocasionará que no se distribuya el agua correctamente por el mal funcionamiento. Además, el equipo no contará con la fuerza necesaria para cubrir todas las zonas de la comunidad de vecinos.
Por último, las tuberías de deteriorarán y se obstruirán, trayendo consecuencias negativas y habrá que realizar una gran inversión para poder cambiarlas.
El mantenimiento a los grupos de presión comunitaria es un proceso muy completo, contando con distintos pasos estructurados destinados a todos los componentes e instalaciones.
Este mantenimiento permite verificar si existe una avería y así poder repararla para que no haya consecuencias a futuro en el sistema.
Lo principal es hacer un diagnóstico completo para encontrar las posibles fallas en el grupo de presión que requiera alguna una reparación.
Las partes que se revisan en el grupo son:
Una vez que se realice la inspección, se procede con varias pruebas para comprobar que los grupos de presión trabajen correctamente; de no ser así, se realizarán las correcciones para que funcione óptimamente.
Todos los mantenimientos se hacen en base a las normativas existentes en el país, con la finalidad de cumplirla y no acarrear problemas futuros a la comunidad de vecinos.
Realizar revisiones periódicas y aplicar un mantenimiento óptimo a los grupos de presión comunitaria, proporciona muchas ventajas. Entre ellas tenemos:
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